En los días del verano, nos hallamos observando un mundo, en el cual el respeto a la naturaleza y amor a todo aquello que nos rodea es roto por la incursión del odio eterno, venido desde otro continente, montado sobre el mar en naves oscuras. El enfrentamiento y la batalla contra el odio eterno es la suma de razas y pueblos diferentes, quienes ven amenazada su existencia.
La obra de Bodoc hace énfasis en proceso de conquista español y todo lo que significó para las gentes de las tierras nuevas. De esta manera dilucida el pensamiento de estas culturas ya extintas o absorbidas por el moderno pensamiento occidental, recreando un mundo rico y colorido, lleno de dichos y saberes propios, todos ellos perdidos en el mundo real.
Los días de la sombra marcan el inicio de un nuevo ataque realizado por las tierras antiguas, y en la cual la muerte, madre de misáines, denominado el odio eterno; se enfrenta a un continente, quien no es mas que una chiquilla de trenzas, la cual le enseña el valor de la muerte, quien no es más que una madre más de todos los seres vivos.
La forma en que divide la parte política de la historia, manejada en la parte norte del continente, por las luchas intestinas en la casa del sol, hacen contrapeso, con las historias intimas relatadas en los poblados del sur, los cuales ajenos a todo esplendor de aquella otra cultura, también se ven afectados por los designios del odio eterno.
Los días del fuego, es la culminación de la lucha, y el nacimiento de una nueva esperanza en el antiguo continente, con el nacimiento de dos hermanos, quienes traen de regalo a la raza humana, el valor y el sentido de vivir.
Liliana Bodoc es la primera escritora latinoamericana que clasifico dentro de los cánones de la literatura fantástica, principalmente por el hecho de relatar una historia real a través de un colorido mundo de significados propios, gracias a una prosa increíble, y una imaginación desbordante y magnífica.
Es altamente recomendada a todo aquel que no se deje amedrentar por una lírica que va más allá de lo común, mezclada con frases de carácter cuasi-filosóficos y por una total carencia de la grandilocuencia, tantas veces leída en libros de carácter épico.
Simplemente me queda dar las gracias a Liliana Bodoc, por su increíble mundo, del cual, los latinoamericanos hacemos parte.
CAPANDRES.